jueves, 6 de noviembre de 2008

"LOS CHICOS SON PROTAGONISTAS DE LA FELICIDAD EN SU CASA"

PRIMERA PARTE DE LA NOTA A TISTA ALVAREZ, CATEQUISTA DE LA CIUDAD DE PEHUAJO.

¿Cómo es trabajar de catequista?
No es un trabajo, no existe trabajar de catequista. Uno es catequista cuando uno transmite Evangelio y transmite fe. Si yo no transmito conocimiento, si bien que uno estudia, se prepara y demás pero lo que vos transmitís es la fe en Jesucristo, entonces hay una metodología, un sistema para trabajar con los chicos, para trabajar con los grandes, hay material, hay bibliografía, se hace ordenadamente, pero lo que uno hace es transmitir fe, si yo no transmito conocimiento porque si yo transmitiera conocimiento no transmitiría la fe y lo que tengo que transmitir la fe, transmitimos lo que creemos, nuestra fe en Jesucristo. Lo mismo lo hago yo como lo hizo San Agustín hace 1700 años, como lo hizo Pablo hace 2000 años, como lo hace la catequista acá al lado, todos transmitimos la misma cosa: la fe en Jesucristo, en Jesucristo resucitado.
Para ser catequista ¿Qué requisitos se precisan? O cualquiera puede serlo
Para ser catequista tenés que creer, obviamente tenés que ser católico y adquirir la formación necesaria para poder trasmitir la fe de un modo coherente, de un modo razonable; entonces quien no cree no puede ser catequista, quien dice solamente “yo voy a misa pero no creo en los curas” o “soy cristiano pero no creo en la confesión”, la Iglesia tiene sus preceptos, sus postulados, que están puestos por el mismo Jesucristo, entonces cuando uno adhiere a toda esta cosa uno es cristiano, entonces cuando uno es cristiano puede transmitir lo que siente. Eso es ser catequista.
¿Cuánto de docente hay que tener?
Cuanto más capacidad, cuanto más te guste enseñar a los chicos, más fácil va a resultar. Un chico no aprende catequesis porque apruebe un libro o porque venga 2 años al curso, aprende catequesis cuando el catequista le enseña a amar a Cristo, le transmite la misma enseñanza que le dio Jesús a sus discípulos, que es lo mismo que hacemos nosotros.
¿Cómo se hace para enganchar a un chico que sale de una clase?
A un chico no se lo engancha, acá interviene Dios siempre. No es casualidad catequesis, entonces no es casualidad que vengan los chicos sino que hay una intención de los padres por dar una formación, los padres mandan a los chicos a catequesis para que aprendan valores, para que aprendan cosas buenas, para que se formen espiritualmente. Hay intervención directa de Dios, de Jesucristo, de los padres para motivarlos a mandar a sus chicos; así lo hicieron nuestras abuelas, así se transmitió de generación en generación el catolicismo; entonces vienen los chicos y a partir de que vienen los chicos uno les enseña a descubrir a Cristo, a descubrir a Jesús con el Evangelio, con la luz del Evangelio, con la luz de la doctrina del Evangelio. Entonces un chico aprende a amar, aprende a perdonar, aprende a decir la verdad, aprende a que es mejor ser buen hijo y cumplir los mandamientos que no hacerlo, aprende que es mejor estudiar y ser buen alumno que copiarse porque copiarse es trampa y la trampa no va con la verdad, entonces todas estas cosas uno se las resalta al chico, el chico las aprende, se da cuenta porque eso es así, entonces cuando se da cuenta que existe la verdad, que existe la vida, que existe el amor, ahí descubre a Jesús, ahí descubre a Cristo, entonces se queda enamorado de eso, no se queda enamorado ni del discurso del catequista ni del catequista, el catequista les presenta a Cristo y ellos se dan cuenta de lo que es y ellos vienen. Yo tengo casi todos los ejemplos de los chicos que me tocan a mí por ejemplo, muchos vienen espontáneamente, ni siquiera los padres los mandan, vienen porque les gusta, vienen porque vienen.
¿Qué pasa con los padres que mandan al chico a un catecismo pero que no ofrecen un buen ejemplo?
El chico empieza a notar una contradicción entre la doctrina de Jesús, entre un comportamiento evangélico y un comportamiento humano cualquiera, el chico empieza a notar diferencias, entonces cuando vos proclamas el amor, el perdón, la amistad como valores evangélicos, como valores de Jesucristo y el chico va a su casa y se encuentra que sus padres se pelean, que sus padres se separan, que sus padres no perdonan, el chico empieza a ver que es mucho mejor el mundo de Jesús que el mundo que a lo mejor tiene en su casa y empieza a reclamar. Entonces, en mi caso particular, siempre les resalto a los chicos que ellos son protagonistas de la felicidad en su casa, entonces ellos tienen que ser Cristo en su casa, quien va a decir la verdad si no la dicen ellos, quien va a amar si no aman ellos, quien va a perdonar si no empiezan a perdonar ellos.
A su vez los catequistas hacemos reuniones con los padres y les explicamos estas cosas, nosotros a sus hijos les estamos enseñando a perdonar porque Jesús dijo que hay que perdonar. Eso tiene que estar apoyado de la casa y la primer catequesis que los chicos reciben es en su casa, aprender a ser bueno ¿Qué padre no trata de que su hijo sea bueno? La bondad, el amor, el amor de madre, de padre, eso es Dios, no son valores que inventó el hombre, eso es propiamente Dios, entonces cuando uno le hace dar cuenta a los chicos y a los padres empiezan todos un camino hacia Cristo.

LA 2º PARTE PRONTO, ESPERO QUE HASTA ACA HAYA GUSTADO

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